Es común que algunas personas quieran adjuntar archivos en sus mensajes de LinkedIn, como si fuera un correo electrónico: una presentación, una imagen o cualquier documento. Sin embargo, LVI no permite hacerlo.
¿Por qué?
Igual que en el correo, los adjuntos son un factor de riesgo para los filtros anti-spam. Seguro alguna vez tu email bloqueó un archivo por ser muy grande o por no pasar el antivirus.
En LinkedIn pasa lo mismo: enviar archivos adjuntos puede activar alertas de spam y poner en riesgo tu perfil, limitando tu alcance y capacidad de contacto. Por eso, LVI los bloquea para proteger tu cuenta.
¿Qué hacer entonces?
Fácil: sube tu archivo a Google Drive, Dropbox o el servicio que uses, genera un enlace y colócalo en el mensaje.
LinkedIn incluso puede mostrar una vista previa del contenido, haciéndolo más atractivo visualmente. Es la opción más segura y efectiva.


